Allá por mayo de este 2010, en este mismo sitio estábamos dando cuenta del serio interés que había por parte de Electronic Arts de trabajar en base a un clásico juego de mesa. Pues bien, ahora tenemos que decir que finalmente esa intención por parte de dicho compañía se ha hecho realidad. Es así como ha nacido Monopoly Streets, el cual ha salido recientemente al mercado y se puede disfrutar a través de las plataformas Xbox 360, Nintendo Wii y PlayStation 3. El precio recomendado para la primera es de 51 euros, mientras que para las otras dos el costo ronda los 41 de la misma moneda.
Una vez que le echemos mano notaremos que el objetivo es tan directo como ambicioso, o sea, obtenerlo todo. Empezaremos desde el punto cero, y con cada acción y movimiento que realicemos observaremos cómo empezará a cambiar el desarrollo del paisaje urbano. De hecho, propiedades clásicas como el paseo marítimo o el emblemático Park Palace podrán ser adquiridas por nosotros. Claro, para conseguir ello habrá que ejecutar tres labores fundamentales: construir, negociar y comprar. Por su parte, existirá la posibilidad de optar por tableros distintos, más allá del clásico conocido y usado por infinidad de familias a lo largo de más de setenta años.
Por su parte, uno de los agregados que más promete es el de las subastas, las cuales se ejecutarán en vivo. En ellas habrá que intentar adquirir una propiedad, teniendo en cuenta, obviamente, el precio del mercado y si te conviene o no de cara al futuro para incrementar tu riqueza. A su vez, tampoco hay que olvidar el denominado Reglamento de la casa, el cual contará con una opción para que puedas jugar con otros usuarios que se encuentren en línea. Para ello, podrías utilizar o bien a tus Mii, (en el caso de Nintendo Wii), o bien tus avatares (en el caso de Xbox 360).
Por otro lado, este ya histórico juego de mesa también estará disponible en Facebook. Además, contará con sus versiones para iPod touch e iPhone. De acuerdo a lo informado, estas últimas presentaciones se lanzarán en la venidera época navideña.