Niko Bellic es el protagonista principal de la cuarta entrega de la saga Grand Theft Auto para Xbox 360, PC y Play Station 3. Rudo, despiadado y distante, busca una nueva vida luego de los horribles momentos que vivió al luchar en las guerras de Yugoslavia.
Sin embargo, en el fondo Niko es una persona con sentimientos y una gran valoración por la amistad y la lealtad. De pequeño, al crecer en un ambiente repleto de violencia doméstica (su padre era un alcohólico), tuvo una relación muy cercana con su primo Roman Bellic, a quién va a visitar a poco de llegar a Liberty City, donde buscará una nueva vida.
Luego de la guerra comenzaría la vida criminal de Niko, que lo vería envuelto en varios crímenes para un poderoso traficante de personas llamado Rodislav Bulgaria. Además de ganarse varios enemigos por su forma de trabajar y comportarse con sus compañeros, Niko buscaría la forma de escapar de esa línea de trabajo y se ganaría el odio de una agrupación mafiosa mucho más grande de lo que supone.
Al llegar a Liberty City los contactos de Roman lo pondrían a trabajar con la mafia rusa, y a partir de ese momento los eventos del juego, una de las joyas de la nueva generación, imperdible en cualquier consola.
Hace un dupla muy cómica con su primo, al que protege y estima. Y siempre se ve envuelto en problemas por su culpa, a los que tiende a resolver con la violencia y sus conocimientos en armas y otro tipo de operaciones criminales.
En su interior anida un profundo deseo de venganza, debido a la muerte de muchos de sus amigos que vio durante la guerra. Uno de los momentos más interesantes del juego es el que nos permite elegir si Niko consumará finalmente o su venganza, o hará caso a lo que su primo y seres queridos (los pocos que le quedan) le dicen: dejar ir.
Humano, violento pero muy preocupado por su familia, Niko es un claro ejemplo de la profundidad de la narrativa que se puede conseguir en los nuevos títulos, unidos a gráficos de ensueño.