Link, el personaje principal de la saga de acción y aventura The Legend of Zelda, es un emblema de la industria de los videojuegos. Sin importar sus cambios estéticos, que van desde estilos adolescentes y aniñados hasta algunos más adultos y tenebrosos, estamos ante la reencarnación constante de un héroe que dedica su vida a salvar al reino de Hyrule.
Según da a entender Ganondorf (el malo por excelencia de la saga), Link reencarna una y otra vez y lucha para detener a la oscuridad poseyendo el poder de la trifuerza del Valor. Según las habilidades que ha demostrado en cada juego, controlar el tiempo (Ocarina of Time) o el viento (The Wind Waker), a veces otros personajes se refieren a él como “Héroe del Tiempo” o “Héroe del Viento”, pero es principalmente una manera de generalizar al personaje, un héroe clásico que responde a las características básicas de nobleza, fortaleza y decisión.
Perteneciente a la raza de los Hylianos, Link posee gran fuerza y ha demostrado capacidad de realizar todo tipo de ataques mágicos y físicos, además a lo largo de sus aventuras ha encontrado la mítica Espada Maestra en varias ocasiones, y esto le ha permitido sobrevivir a todo tipo de ataques por parte de las criaturas malignas.
Creado por Shigeru Miyamoto, Link apareció por primera vez en 1986 en la primera aventura de The Legend of Zelda, donde también hicieron acto de presencia la princesa Zelda y el malvado hechicero Ganondorf.
Con esta base, los juegos tienden a mostrarnos la lucha entre el bien y el mal, la tecnología y la naturaleza y los poderes de la trifuerza son la estructura principal del mundo de Zelda, y salvar a Hyrule es la tarea que nuestro héroe vestido de verde debe llevar a cabo en cada título, luchando contra todo tipo de enemigos, puzzles y jefes finales.